En respuesta a un pensamiento interno como “eres idiota” es necesario responder en primera persona de manera positiva, dando respuestas como “yo soy una persona inteligente que a veces tiene problemas, pero lo suficientemente competente como para salir adelante”.

La reestructuración cognitiva es un proceso muy utilizado en terapia que consiste en la identificación y la confrontación de los pensamientos negativos e irracionales.

Diferénciate de tus pensamientos Para eliminar pensamientos negativos es aconsejable establecer una distinción entre el pensador y el pensamiento, es decir, entre mi Yo consciente, capaz de generar multitud de pensamientos diferentes, y el pensamiento concreto que se está produciendo en mi mente.

Hay una estrategia muy efectiva que demanda un pequeño ejercicio de visualización. Debemos ver nuestros pensamientos disfuncionales como hormigas, como pequeños insectos que se mueven sin rumbo y que llenan cada recoveco de nuestra mente. El objetivo es eliminarlas de nuestro interior para recuperar la armonía. ¿De qué manera?

El objetivo común de todas las técnicas aplicables será apartar el pensamiento obsesivo de la atención consciente y procurar que nos centremos en las vivencias del momento presente

Por último, recuerda que si estás atravesando una etapa en la que todos estos pensamientos te causan mucha ansiedad y notas read more que no puedes controlarlos, no dudes en buscar apoyo profesional.

Recuerda que el proceso puede llevar tiempo, pero con paciencia y dedicación, es posible cambiar la forma en que percibes y gestionas tus pensamientos.

Estilos de apego inseguros: Los estilos de apego formados en la infancia pueden influir en cómo nos relacionamos con nosotros mismos y con los demás en la adultez.

La autocompasión es realmente reconocer lo que significa ser humano: cuáles son nuestras necesidades básicas

Esta técnica, conocida como ACT por sus siglas en inglés, invita a aceptar las emociones y pensamientos negativos sin juzgarlos. En lugar de luchar contra ellos, se trata de reconocerlos y luego redirigir tu energía hacia acciones alineadas con tus valores y objetivos.

El que culpa: este crítico interno usa la culpa y el reproche, lo que causa sentimientos de ansiedad y falta de autonomía.

Es importante entender que los pensamientos no son más que actividad mental, y que si aprendes a tomar cierta distancia de ellos y los contemplas con serenidad, podrás convivir con esa parte de ti mismo/a que tanto malestar te genera ahora mismo.

«El trabajo del pensamiento se parece a la perforación de un pozo: el agua es turbia al principio, pero luego se clarifica».

Cuando te sientas triste o preocupada/o, tómate unos momentos para hacer una pausa y respirar profundamente para anclarte en el momento presente.